El próximo jueves 3 se entregará en el salón de plenos del Palacio Provincial el XXVI Premio de Poesía Jaime Gil de Biedma, que organiza la Diputación de Segovia, y que este año ha recaído ex aequo en el madrileño Jacobo Llano Sánchez por su obra "El silencio de los peces" y en el cordobés Francisco Onieva por "Pertinaz Freelance".
El presidente de la Diputación, Francisco Vázquez, será el encargado un año más de presidir el acto, en el que además de los premiados, intervendrá el coordinador del galardón Gonzalo Santonja.
En la misma ceremonia, en la que se espera la presencia de distintas autoridades, así como algunos miembros del jurado que falló el premio, se hará entrega también del accésit otorgado por Bankia y que este año ha recaído en el ovetense afincado en Madrid Sergio Fanjul, por su obra "Pertinaz Freelance".
Los tres galardonados aguardan con impaciencia la llegada del día de la entrega de sus premios. Los tres afirman haber recibido ya parte de su galardón con la multitud de felicitaciones que les han llegado desde que se hizo público el fallo. Ahora llega el momento de recibir la dotación económica de que consta el premio (10.000 euros para el ganador, que se repartirán entre los dos; y 3.000 euros para el accésit), una escultura diseñada por José María Pérez de Cossío y la edición impresa de sus poemarios gracias a la editorial Visor.
Los tres elogian al poeta Jaime Gil de Biedma. "Un poeta de cabecera", que suelen releer. "Lo último que he leído son los diarios de Jaime Gil de Biedma en la edicion de Andreu Jaume, que estaban inéditos", comenta Jacobo.
Regreso a Segovia
Los tres volverán también a Segovia, una ciudad que ya han recorrido en alguna ocasión. Francisco Onieva conoce también distintos espacios de la provincia como La Granja, Pedraza o Sepúlveda; Jacobo Llano se ha movido mucho por la zona de Carbonero, donde tiene algunos amigos; mientras que Sergio Fanjul paró en La Granja y el Centro Nacional del Vidrio en sus viajes a su Asturias natal.
Los dos ganadores se presentaban por primera vez al premio. Jacobo Llano dice de "El silencio de los peces", el libro con el que ha ganado: "Citando al propio Gil de Biedma, diría que es un intento de comprender poéticamente la dificultad que hay en las relaciones entre padres e hijos". Por su parte, Francisco Nievg asegura que Vértices "es una reflexión acerca de la incertidumbre y las dudas provocadas por el hecho de ser padre, conectadas con las dudas e incertidumbres de las que nace la creación literaria".
Fanjul ya se había presentado en una ocasión al Gil de Biedma e incluso su obra fue finalista. De su trabajo "Pertinaz Freelance", comenta que "es un libro curioso, porque trata de temas que no trata habitualmente la poesía, como la vida del autónomo, o la adicción a las redes sociales".
Casi 1.300 obras
Las 1.298 obras presentadas este año al galardón procedentes de 35 países demuestran que, superadas las bodas de plata, el Premio Gil de Biedma mira con optimismo al futuro como el premio más importante de poesía en lengua castellana.
Los ganadores del Gil de Biedma habían sido, hasta ahora, Luis Javier Moreno -recientemente fallecido-, José Pérez Olivares, Juan Carlos Pérez Mestre, Antonio Hernández, Santiago Sylvester, Concha García, Esperanza Ortega Martínez, Diego Jesús Jiménez, José Luis Puerto, Fernando Quiñones, José María Muñoz Quirós, José Viñals Correas, Miguel Florián Rábanos González, Clara Janés Nadal, Adolfo Alonso Ares, Jorge Urrutia, Manuel Vilas, José Luis Rey Cano, Juan Manuel González Gómez, Victoriano Cremer, Ricardo Bellveser, Carlos Aganzo, Miguel Albero Suárez, Javier Lorenzo Candel, Joaquín Pérez Azaustre, Fermín Herrero o el también fallecido Santiago Castelo.